Transparencia, gastos y deuda

Una vez terminado el mercado cervantino y en pleno resacón del gobierno municipal por el indudable éxito de público, no queremos dejar de incidir en una de las principales novedades con la que nos hemos encontrado este año. Sin entrar en la parte técnica ni en cuestión de gustos, ha sido muy llamativo que este año la organización del mercado haya recaído en una empresa privada, resultante de un concurso público. Esta novedad ha sido acompañada con el dato de que por primera vez el ayuntamiento iba recaudar dinero con el mercado cervantino.

Esta aparente buena noticia nos trae a la mente dos ideas que ya no son tan positivas. La primera es la misma idea que surge ante todas las noticias de privatizaciones y subcontrataciones en cualquier administración: a pesar del elevado número de cargos públicos, de asesores y de funcionarios de libre designación con elevados complementos específicos, la única manera de “gestionar bien” parece ser pasar la tarea a manos privadas, posición que no compartimos desde Equo. La segunda idea, en la que nos centraremos en este caso, es que es difícil saber si el ayuntamiento gana dinero con el mercado cervantino porque, al igual que ocurre con otros actos organizados por el consistorio local, existe una absoluta falta de información al respecto. Nos preguntamos si ciertos gastos (como horas extras de trabajadores del ayuntamiento, publicidad, limpieza,…) han sido tenidos en cuenta a la hora de realizar el balance costes-beneficios de esta actividad.

En Equo no nos cansamos de repetir la necesidad de una absoluta transparencia en la gestión de las administraciones, sobre todo en el tema económico y, excepto alguna cifra genérica, este ayuntamiento no presenta ningún otro tipo de dato al respecto.

Las cuentas claras, mas transparencia

El ayuntamiento lleva varios meses intentando convencernos de que están realizando una gestión impecable, y nos vende que muchos de los actos que realiza no cuestan dinero o muy poco, lo cual, como ya hemos dicho, es difícil de creer a falta de datos suficientes. Esta incredulidad parte de la base de que las mismas personas que llevan el mando de este ayuntamiento desde hace algunos años, son los que nos han llevado a una deuda reconocida de 268 millones de euros. No se salva nuestro alcalde, pues ya estaba en este ayuntamiento en 2012, año en el que aumentó la deuda en 50 millones de euros.

El mes pasado tuvimos que asistir atónitos a las justificaciones de Marta Viñuelas sobre el aumento de la deuda en 2012: se han aplicado los criterios contables recomendados por la Cámara de Cuentas (luego la deuda ya era mayor antes, pero no nos contaban toda la verdad) y la culpa de todo la tienen esos malvados señores de UPyD. A pesar de la autodeclarada buena gestión del equipo de gobierno, la realidad es que hay que pedir al Estado un adelanto de más de 17 millones de euros para el pago a proveedores pendiente de 2012, y en 2014 tendremos que apretarnos el cinturón: reducir gastos y aumentar impuestos.

Es un pena que la falta de información, propicie que tengamos que esperar hasta finales de 2014 para saber si la gestión que están realizando últimamente Javier Bello y su equipo es tan maravillosa como nos quieren hacer creer. Desde Equo Alcalá-Torrejón nos tememos que exista muy poco control sobre los gastos e ingresos reales en este ayuntamiento y que la deuda aumente en 2013, teniendo que aguantar otras increíbles explicaciones y preguntándonos si llegará a intervenir el Estado a ayuntamientos como Alcalá o Torrejón si acumulan años de incumplimiento en la reducción de su deuda y en los planes de viabilidad acordados.