Protección para el puerto de Navacerrada

La gestión de la biodiversidad ha sido el tema principal de Día Internacional de las Montañas que se ha celebrado hoy 11 de diciembre. Ecologistas en Acción ha aprovechado esta conmemoración para reclamar protección para el puerto de Navacerrada, el enclave más degradado de la montaña madrileña, y reivindicar la conservación y la protección como herramientas de creación de riqueza.

«La celebración de la vida de la montaña» ha sido el título elegido por la ONU para recordar la importancia del desarrollo sosteible y el cuidado de la biodiversidad en esas áreas. Navacerrada es la antítesis de este objetivo. En el puerto de Navacerrada, el más alto de la región con 1.860 metros, se destruye biodiversidad.

Desde la inauguración del primer telesilla a mediados del siglo XX, el paisaje natural de alta montaña se ha ido sustituyendo por bloques de apartamentos, hoteles, albergues e instalaciones de esquí. Construcciones e infraestructuras de elevado impacto ambiental y paisajístico que de forma caótica han ido invadiendo el espacio natural a costa de los pastos de montaña, los roquedos, el piornal y el enebral.

El factor principal de la degradación ambiental del puerto de Navacerrada es la estación de esquí, un negocio poco sostenible en la meseta castellana. Las precipitaciones en forma de nieve se reducen, al tiempo que aumenta la temperatura media, por lo que hay que innivar de forma artificial, con el consumo de agua y energía que conlleva.

La Comunidad de Madrid se ha empeñado en mantener el esquí, pese a ser una actividad con poco futuro. Por ello, el puerto de Navacerrada ha quedado fuera de toda figura de protección. No se incluyó en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares y más recientemente ha quedado como una isla sin protección entre el futuro parque nacional y su zona periférica de protección.

A los problemas derivados de la estación de esquí hay que sumar la celebración de eventos multitudinarios que concentran a cientos de miles de personas en un entorno muy frágil de alta montaña. Entre estos cabe destacar la subida al Alto de Guarramillas o Bola del Mundo, de la Vuelta Ciclista a España. Tampoco se ponen cortapisas a la instalación de nuevas pistas de esquí, paravientos, tubing para deslizarse tanto en invierno como en verano o a la utilización de las pistas de esquí para competiciones de bicicleta de montaña, durante los meses de verano.

Ninguna de estas iniciativas consolida el ruinoso negocio de la nieve pero sí deterioran una zona de montaña de elevado valor natural y un enclave emblemático en la Sierra de Guadarrama.

La organización conservacionista Ecologistas en Acción ha reivindicado la conservación y la protección como herramientas de creación de riqueza en las zonas de montaña. La mejora ambiental del puerto de Navacerrada y la restauración del ecosistema de montaña, sólo traerá beneficios para los municipios de la zona, como así ha sucedido con la restauración del puerto de los Cotos, iniciada en 1998.