Participación Ciudadana en Alcorcón: es que nos da la risa…

«Opinión»  – Hace unos días nos despertábamos con la curiosa reconversión del PP de Alcorcón, aunque sería más correcto decir con la reconversión del alcalde de Alcorcón, ya que nada se mueve en el gobierno municipal sin su estricta aprobación, a los lugares noventeros de los presupuestos participativos (verdaderamente la sociedad española retrocede por momentos, no solo veinte años, si no en ocasiones 50 o 60. No hay más que ver ciertas banderas o pancartas en la manifestación del pasado Domingo en relación a las Victimas del Terrorismo, o a las reivindicaciones sobre anidad y educación pública) . Anunciaban a bombo y platillo una nueva forma de gobernar, gobernar es escuchar a los vecinos, un acto inaudito en la política de Alcorcón.

Desde EQUO, siempre atentos a la vida municipal, y más si se habla de participación y dar voz a los vecinos, intentamos profundizar en el asunto. Agua de borrajas es algo de más valor que la iniciativa. Se trata de una propuesta para que los vecinos del Parque de Las Flores decidan el destino de una parcela no urbanizada, y siempre dentro de la capacidad del presupuesto disponible. Además, dentro de la publicidad de la iniciativa -la documentación que hemos podido recoger no puede tener otro nombre que publicidad- no se podía dejar pasar la ocasión de introducir matices políticos en la decisión, situando esta iniciativa como la primera a realizar de este estilo, comenzando en lugar tan señalado ya que fue la anterior corporación socialista la que arruinó las esperanzas del barrio con la nefasta construcción del CREAA sin hacer caso al sentimiento vecinal.

¿La primera de una serie de iniciativas? Bueno, eso quiere decir que hay un plan de participación ciudadana, donde se verá recogido las materias a preguntar, si las decisiones serán vinculantes o no, cómo se deciden las preguntas a realizar, si existen debates previos, si se establecerán mesas electorales, si se publicarán los resultados, si serán públicos los recuentos, qué pasará cuando las votaciones tengan resultados ajustados, si únicamente se permitirá el voto presencial, si sólo podrán votar los vecinos del barrio afectado, si se extenderá la votación a los menores cuando el asunto en cuestión pueda afectar, si los vecinos podrán proponer temáticas, … y un sin fin más de detalles que marcan la construcción de un verdadero sistema de participación ciudadana. Evidentemente no encontramos nada de eso. Oscurantismo total respecto de cualquiera de las anteriores preguntas.

No se trata pues de un plan de participación ciudadana, de construir Alcorcón desde la base de la implicación en las decisiones cercanas, de que los vecinos podamos decidir el destino de los presupuestos del Ayuntamiento, que entre otras cosas vienen de nuestros impuestos. Se trata llanamente de una iniciativa populista con un doble objetivo, que el máximo líder del PP de Alcorcón pueda pavonearse de sacar una urna a la calle y que todos sus acólitos le hagan reverencias y de hacer demagogia con el tema de escuchar a la gente en estos tiempos de tanta desafección política.

Desde EQUO tenemos claro que este gobierno municipal no quiere escuchar a sus gentes. Y lo demuestra a todas horas. Mandando a la Policía Municipal a reprimir a aquellos que quieren proponer nuevas formas de hacer política denunciando sus desmanes con los gastos en puestos de libre designación mientras despide -ilegalmente en muchas ocasiones- a trabajadores públicos, negando el espacio en los centros cívicos a plataformas que quieren debatir sobre el estado de la ciudad, calificando de agentes extranjeros a todo aquel que tenga la osadía de protestarle en cualquier acto público , o simplemente bloqueando en twitter a cualquier vecino que se digne a pedir alguna explicación y no mesurar sus grandes logros en el exterminio de las grandes lacras que asolan la civilización occidental, a saber, el socialismo corrupto-despilfarrador, el comunismo genocida, el aborto y las mentiras del 11-M.

Si de verdad existiera un ánimo de escuchar a las gentes de Alcorcón, los plenos municipales se celebrarían a otras horas, se dejaría hablar a los vecinos en ellos sin implantar medidas coercitivas que van hasta la imposición de multas cuando el Alcalde Presidente decida, desde su óptica particular, expulsarte del Pleno por cometer lo que él considere que son faltas. O simplemente abriría a información y debate público todo lo que tiene que ver con Eurovegas, macroproyecto que cambiará la fisonomía de esta ciudad y que solo soportaremos los que de aquí somos, no como la mayoría de este gobierno municipal que solo ha venido a Alcorcón desde el sentimiento de reivindicar la cruzada contra este Sur infiel y rojo.

Por todo ello, desde EQUO hacemos un llamamiento a la ciudadanía de Alcorcón para que no se deje engañar por iniciativas vacías de contenido y que seguramente serán utilizadas en contra de su propio interés.

La participación ciudadana es algo más que decidir que hacer con un descampado!!!