EQUO Madrid pide que el Ciclocarril, con limitación de 30Km/h para coches, se lleve a cabo en otras vías de la ciudad, además de la M-10

Bicicleta ciudadEQUO Madrid valora positivamente la “devolución” de dos carriles de la M-10 al transporte público – bus- y a la bicicleta, a partir de septiembre, restringiendo un ciclocarril a coches que circulen a menos de 30 Km/hora, a fin de reducir la contaminación y el tráfico, así como mejorar la movilidad en la ciudad de Madrid.  Esta organización política lamenta que el Plan Director de Movilidad Ciclista, que fue aprobado por unanimidad, se haya demorado en varias ocasiones. Sin embargo, Ramón Linaza, co-portavoz de EQUO Madrid, considera un paso adelante que, “poco a poco, la mentalidad tanto de la ciudadanía como de las instituciones vaya cambiando. Hay una demanda real de más espacio y mayor seguridad para peatones y ciclistas, que sólo es posible satisfacer a costa de reducir el uso del coche”.

Linaza también recuerda que “el Ayuntamiento de Madrid hizo inversiones muy costosas para ampliar la M-30 y favorecer la movilidad motorizada, contribuyendo tanto al endeudamiento de la ciudad como a un modelo de movilidad insostenible y, por tanto, ahora son necesarias y urgentes medidas dirigidas a un modelo alternativo”. Así, EQUO Madrid considera que la implantación de carril de prioridad bici, con limitación de 30Km/h, también debería llevarse a cabo en otras vías de la ciudad.

Por otro lado, el co-portavoz ha pedido que el proyecto Mybici, para un sistema de bici pública de alquiler, y la Oficina de la Bicicleta no se retrase más allá de otoño, dado que sigue pendiente desde la pasada legislatura de Gallardón.