
Exige la intervención inmediata del Ayuntamiento de la capital, que forma parte fundamental del conflicto.
EQUO Madrid ha exigido al Ayuntamiento de Madrid que intervenga en el conflicto de la limpieza viaria y jardinería, conminando a las concesionarias a una solución inmediata, de tal forma que se garanticen los servicios esenciales y los puestos de trabajo. En este sentido, EQUO ha afirmado que el Ayuntamiento de Madrid no puede mirar hacia otro lado, ya que es parte del conflicto.
El nuevo contrato de limpieza y jardinería integral que divide Madrid en seis zonas, está en el origen del conflicto y la huelga indefinida, que ha comenzado hoy. A raíz del mismo, las empresas adjudicatarias han planteado un ERE que afectaría a más de 1100 trabajadores, junto con fuertes recortes laborales y salariales que hacen que la capital se vea cada vez más sucia y descuidada.
Los servicios de limpieza y jardinería han venido sufriendo importantes recortes en los últimos años, que se han saldado con un incremento de la suciedad que está deteriorando de la imagen de Madrid y la calidad de vida de la ciudadanía, al tiempo que se reduce el empleo y mayor precariedad en las condiciones laborales. A pesar de ello, el nuevo contrato exige rebajas adicionales del 10% y, por tanto contratos a la baja, que las concesionarias ya habían rebajado previa y temerariamente para garantizarse la adjudicación. En ese momento de la concesión, el Ayuntamiento no planteó ninguna clausula que garantizase la mínimas condiciones laborales y de los servicios y, la consecuencia de todo ello, son los expedientes de regulación de empleo que ahora se plantean y que afectan a más de mil trabajadores, que se suman a los 350 ya afectados previamente.
Para EQUO Madrid, el nuevo contrato por zonas y sus consecuencias, es responsabilidad completa del Ayuntamiento de la capital. “Es una hecatombe para los trabajadores y un riesgo para la ciudadanía que soporta cada día niveles más insoportables de insalubridad. El Ayuntamiento ha actuado con prácticas claramente temerarias, que ponen en riesgo a los trabajadores y al propio desarrollo de servicios esenciales para la ciudadanía”, afirma Ramón Linaza coportavoz de EQUO Madrid .
Linaza añade que, una vez más, el Consistorio “condiciona el bienestar de la ciudadanía y la dignidad de los trabajadores, a los beneficios de las empresas concesionarias”.
Según EQUO, el Ayuntamiento no puede quedarse al margen, ya que tiene responsabilidades directas por haber validado ofertas que no garantizan los servicios esenciales y por no haber introducido cláusulas de garantías en los contratos que aseguren los derechos de los trabajadores afectados y por plantear un sistema “a la carta“ para las grandes empresas vinculadas a las constructoras.
EQUO Madrid ha defendido la importancia vital de estos servicios en la ciudad, que están sufriendo desde hace tiempo las consecuencias de los recortes. Suponen un incremento de la suciedad, y por tanto, de los riesgos y están degradando de forma escandalosa las condiciones de vida de los barrios y la ciudad.